La Navidad es sinónimo de regalos y sorpresas, y cada año los hogares se llenan de juguetes electrónicos, luces de colores y pequeños aparatos que funcionan con pilas y baterías que, una vez finalizada su vida útil, necesitan una correcta gestión.
Y es que, si este proceso no se lleva a cabo de manera adecuada, estos residuos pueden liberar metales pesados y contaminar el entorno, afectando al medio ambiente y la salud de las personas.
Por eso, reciclar pilas es un gesto sencillo pero esencial para celebrar unas fiestas navideñas más responsables, sostenibles y que fomenten la economía circular.
Consejos para reciclar pilas usadas en Navidad
Gestionar correctamente las pilas y baterías que han finalizado su vida útil es más fácil de lo que parece, ya que siguiendo unos sencillos pasos se puede contribuir de forma rápida al cuidado del medio ambiente.
En primer lugar, hay que tener en cuenta que nunca deben tirarse a la basura doméstica y que lo ideal es llevar los RPA a puntos limpios, comercios adheridos o contenedores específicos de recogida.
Pero, antes de depositarlas en estos espacios, es preferible tener en los hogares un recipiente para guardarlos de manera segura, separados de objetos metálicos para evitar cortocircuitos.
Además, esta circunstancia puede ser una buena oportunidad de concienciar a los más pequeños ya que, en el momento en el que las pilas de cualquier juguete finalizan su vida útil, se pueden llevar al contenedor especializado, fomentando así el reciclaje entre los niños y niñas.
Y es que, este año, regalar en Navidad también puede significar regalar responsabilidad. Con pequeños gestos como reciclar las pilas y baterías, estas fechas pueden ser un poco más limpias y respetuosas con el medio ambiente.





